Domingo, 24 de Noviembre 2024
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España Partido Socialista Titulo: Ciudadanía española en el exterior. Texto: La ciudadanía española en el exterior es un valor de presente y de futuro para nuestro país. Más de un millón quinientas mil españolas y españoles, depositarios de una herencia histórica, social, política y afectiva excepcional, han contribuido decididamente a la evolución democrática y económica de España. Una ciudadanía de la que no podemos prescindir y con la que tenemos que afianzar aún más nuestros lazos. Hay que recordar que desde 1982 a 1996, con los gobiernos de Felipe González, el PSOE impulsó los Consejos de Residentes Españoles (CRE), el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (inicialmente Consejo General de la Emigración) o las pensiones asistenciales por ancianidad. En su segunda etapa, de 2004 a 2011, con los gobiernos de José Luís Rodríguez Zapatero, el PSOE puso en marcha, entre otras medidas, la Ley de Niños de la Guerra, el aumento de las pensiones asistenciales, el Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior, la Ley de la Memoria Histórica (con apertura de vías para la concesión de la nacionalidad española a hijos y nietos), la Oficina del Retorno o el Portal de la Ciudadanía Española en el Exterior. También se cambió el léxico de emigración por el de ciudadanía española en el exterior, en adecuación con la nueva realidad. Sin embargo, al final de la pasada legislatura, la reforma de la LOREG dificultó la participación de la ciudadanía española en el exterior, generalizándose el voto rogado, lo que generó incomprensión e inquietud en dicha ciudadanía y dentro de la propia Federación y Agrupaciones del PSOE en el exterior. Esto ha provocado desafección política por parte de la ciudadanía y de la militancia socialista. Corresponde, ahora pues, desarrollar un procedimiento en el que el elector del exterior reciba, en cada convocatoria y de oficio, el material de voto y pueda elegir si utilizarlo bien por correo o depositándolo en el consulado, o bien ejercer –en su momento- su derecho por internet a través de un sistema que ya funciona con éxito y seguridad en otros países, y que deberá desarrollarse también en el nuestro. Representación política.- Es claro que ampliando los cauces de participación para que la ciudadanía española en el exterior intervenga en la definición, ejecución y control de las actuaciones de gobierno, se consigue una mejor adecuación con las necesidades de cada lugar y condición social. El nuevo impulso socialista debe apostar, pues, por una representación política de la ciudadanía española del exterior, tanto en las instituciones como en la dirección del Partido, y por una mayor capacidad de intervención en los asuntos públicos, especialmente en aquellos que les afectan. En esta línea, cabe dar respuesta a la reivindicación histórica de nuestra ciudadanía en el exterior de contar con una representación parlamentaria directa, en condiciones de igualdad democrática con los demás españoles, tal y como nos comprometimos en nuestro programa electoral de 2008. Así, dada la dispersión geográfica y la disparidad de situaciones de los residentes en el extranjero, el PSOE debe considerar esencial la creación de distintas circunscripciones exteriores para la elección de diputados y senadores que representen a la ciudadanía del exterior, al igual que ya existen en Francia, Italia o Portugal. Derechos de ciudadanía.- Tras los importantísimos avances impulsados por los gobiernos de Zapatero, cabe mejorar las condiciones de acceso a la nacionalidad española, especialmente en cuanto a su adquisición por parte de los cónyuges extranjeros casados con españoles residentes en el exterior, todavía pendiente. Además, las mujeres y hombres socialistas hemos de ofrecer una respuesta al reconocimiento de las sentencias de divorcio, separación o derecho de familia tramitadas en el exterior. En materia de retorno, resulta necesario promover la cooperación entre administraciones para simplificar los trámites y centralizar la información en la Oficina del Retorno, creando al mismo tiempo el Portal del Retorno. Pese a la crisis económica, debe asegurarse el mantenimiento de las prestaciones sociales que llevaron el Estado de Bienestar más allá de las fronteras españolas –gracias al impulso socialista-, para aquellos ciudadanos residentes en el exterior que atraviesan dificultades sociales, económicas o sanitarias. Asimismo, deberían profundizarse las políticas seguidas en los últimos años con relación a mujeres y jóvenes. Estudiantes en el exterior.- Hemos de seguir reforzando el número de carreras accesibles por la UNED y por las universidades a distancia gestionadas por las Comunidades Autónomas, de manera que la oferta sea lo más equitativa posible respecto a la que tiene un residente en España. Existe, además, la necesidad de impulsar la flexibilidad en los plazos de inscripción de los residentes en el exterior en las universidades españolas. Por otra parte, deberían acelerarse las gestiones para agilizar los trámites y adecuar las convalidaciones de títulos, sin perjuicio de incrementar el número y cuantía de las becas de estudio. El PSOE debe propugnar una modernización de las Aulas de Lengua y Cultura Españolas (ALCE) con el fin de alcanzar unos resultados rentables en términos de inversión educativa e, incluso, propiciar su reconocimiento oficial europeo. Cabe la posibilidad de establecer convenios de financiación con países de habla hispana para integrar a sus alumnos en estas aulas. Acceso a la cultura y a la información.- El PSOE debe impulsar una mejor vía de apoyo público a las creaciones culturales que emanan directamente de la ciudadanía española en el exterior. Nos corresponde defender que se potencien los Centros Culturales de España y las Consejerías Culturales de las distintas embajadas. Cabe plantear la elaboración de ciclos y módulos itinerantes de arte y cultura a iniciativa del Estado español, en conexión con la labor de proyección de la imagen de España. El Instituto Cervantes es una de las mejores tribunas para la promoción mundial de la lengua y la cultura españolas. Tanto es su prestigio internacional, que los países en los que aún no existe sede la reclaman. El PSOE debe defender una política coherente de expansión que tenga en cuenta las demandas procedentes de aquellos lugares interesados por la implantación de una de sus sedes. Asimismo, RTVE ha de ser más partícipe aún a la hora de difundir la realidad de los residentes en el exterior. Sus canales internacionales deben contar con una programación y una dotación presupuestaria adecuada, acorde con su audiencia y labor cívica. Así, se lleva años echando en falta en TVE Internacional un informativo específico sobre la ciudadanía española en el exterior y su actualidad política y social. Fdo.// José Antonio Fernández, Marco Ferrara y Pedro Zerolo