Miercoles, 27 de Noviembre 2024
Cabo de Gata Center. Apartamentos Villa del Mar
Pais Vasco PNV Titulo: The artist, en la política española de nuestros días. Texto: Finalmente he atendido la recomendación de los que me lo han venido proponiendo durante las últimas semanas y esta tarde he ido al cine para ver la película The artist del director francés Michel Hazanavicius. Me ha parecido un trabajo excelente. Una obra original y emotiva; un ensayo de exploración en el universo cinematográfico, que invita a reflexionar sobre la resistencia al cambio y la eterna dialéctica entre lo viejo y lo nuevo. Los dos protagonistas principales, que en la ficción del largometraje representan a los actores George Valentin y Peppy Miller, desarrollan un trabajo colosal. Supongo que no será fácil, para un actor moderno, desarrollar la potencialidad comunicativa que encierra la gestualidad a través de una película muda en la que el grueso del guión ha de ser representado sin palabras. Durante el visionado del film, no he podido evitar la tentación de establecer algún paralelismo entre el argumento de la obra y la actualidad política. Lo siento, pero todo el mundo tiene sus propensiones. Y la política constituye, como es obvio, una de mis principales aficiones. En la secuencia en la que Peppy Miler afirma ante los medios de comunicación que la gente está cansada de viejos actores haciendo muecas ante la cámara y proclama con ardor el lema fuera lo viejo, dentro lo nuevo. ¡Que los jóvenes abran camino!, me ha venido a la mente la figura de Carme Chacón, rodeada de jóvenes, agradeciendo a Rubalcaba los servicios prestados e invitándole amablemente a no empeñarse en seguir prestándolos. Y en el momento en el que George Valentin reivindica su condición de 2artista y sostiene que el cine sonoro no es serio, he evocado a Rubalcaba haciendo notar que Chacón no es la solución. Hasta ahí el paralelismo es bastante claro. La actriz joven y el artista consagrado ofrecen diferentes alternativas y plantean distintas maneras de afrontar el futuro. Mientras la primera apuesta por lo nuevo y pone en valor los activos de la juventud, el segundo apela a los valores de siempre. El eterno y falso dilema entre lo viejo y lo nuevo; entre la senectud y la juventud. Es a partir de ese punto donde se hacen patentes las divergencias entre el guión de la obra y el proceso de primarias que está teniendo lugar en el seno del PSOE. Porque, ni veo a Rubalcaba -como a George Valentin- vencido por las circunstancias, derrotado, abatido y sumido en un proceso de autodestrucción, ni veo a Chacón -como a Peppy Miller-comprometiendo generosamente su posible éxito futuro con el empeño de incorporar a Rubalcaba a un protagonismo compartido. No soy quien para pontificar, pero no creo que, al término de las primarias, vayamos a ver a los dos candidatos socialistas, bailando juntos y compartiendo coreografía con el afecto y la franqueza que reflejan las caras de Valentin y Miller en la última secuencia de la película.