Lunes, 25 de Noviembre 2024
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España Izquierda Unida Titulo: IU quiere despenalizar la muerte digna con su proposición de Ley sobre disponibilidad de la propia vida. Texto: Izquierda Unida, a través de su Grupo Parlamentario de IU, ICV-EUiA, CHA, defenderá ante el Pleno del Congreso la toma en consideración de su Proposición de Ley sobre disponibilidad de la propia vida, que incluye una iniciativa directa para la despenalización de la muerte digna y sin dolor. IU logra así que se produzca un debate parlamentario sobre un importante tema que durante la pasada legislatura fue vetado en reiteradas ocasiones tanto por el PP desde la oposición, como aparcado por el Gobierno del PSOE. El Ejecutivo socialista sólo se decidió a presentar un proyecto de ley que tocaba parcialmente este tema en mayo de 2011 cuando la legislatura estaba prácticamente agotada y los socialistas tenían la seguridad de que este asunto ni podía ser debatido ni daba tiempo a que fuera aprobado, en valoración de IU. El diputado Gaspar Llamazares, impulsor desde hace años de esta iniciativa, ya señaló que IU busca desbloquear actitudes y compromisos que llevan manteniendo desde hace mucho tiempo las dos formaciones mayoritarias para que no se produzca ningún avance sobre esta materia. Sobre el tímido intento propagandístico y sólo de imagen realizado por el anterior Gobierno socialista, Llamazares advirtió que buscaba, como buena parte de otras de sus propuestas, quedarse a medio camino entre sus intereses partidistas y lo que verdaderamente demanda una sociedad avanzada como la nuestra. Se limitaban sólo a unificar la legislación existente en este tema, como las voluntades anticipadas o los cuidados paliativos, pero sin abordar lo fundamental, que es eliminar del Código Penal la penalización existente del suicido asistido. En su opinión, Izquierda Unida busca claramente que no se vuelvan a producir aquí casos propios por todos conocidos como los de Galicia o Andalucía, u otros que tuvieron amplia repercusión mediática como en Italia. Es decir, que aquellas personas que quieren tener un fin de su vida en dignidad y sin dolor dejen de verse imposibilitados de hacerlo por una legislación injusta que así se lo impone a ellos y a sus familias. La iniciativa de Izquierda Unida recoge planteamientos que ya están plasmados en las leyes similares más avanzadas de nuestro entorno europeo. La proposición de ley incluye una modificación del Código Penal para la despenalización de la asistencia a quien mediante actos necesarios o de cooperación activa, permitiere, propiciare o facilitare la muerte digna y sin dolor de otra persona, a petición expresa, libre e inequívoca de ésta. Esta posibilidad queda expresamente restringida únicamente a los casos en el que el paciente terminal sufra una enfermedad grave que hubiera conducido necesariamente a su muerte o le produjera graves padecimientos permanentes y difíciles de soportar, o que, siendo permanente, le incapacitara de manera generalizada para valerse por sí misma. Desde IU se recuerda que el texto de la iniciativa incluye una interpretación integradora de vida y libertad y se señala que la vida es un derecho, no un deber. El sufrimiento extremo no puede ser un deber. Del mismo modo, se plantea la regulación del derecho del paciente a decidir libremente sobre su propia vida, una vez recibida la información médica que como regla general deberá comprender como mínimo la finalidad y la naturaleza de cada intervención y tratamiento, así como sus riesgos y consecuencias, que le presente el responsable médico. A negarse a consentir un tratamiento, lo cual no determinará el alta médica. Para ello se debe modificar el texto de la Ley General de Sanidad. En la exposición de motivos de la proposición de ley Izquierda Unida señala con claridad que la especial importancia de la vida, la irreversibilidad de las consecuencias de la decisión, la eventual implicación de terceros y la vulnerabilidad de los procesos de toma de decisión en determinadas situaciones y etapas vitales hacen necesario adoptar cuantas medidas sean posibles en orden a garantizar la plena libertad de la voluntad del paciente. En este modelo de muerte digna que se presenta se pretende salvaguardar también todos los derechos de los profesionales sanitarios ya que en él se asegura que todo consentimiento cumpla unas ineludibles condiciones de capacidad y validez, se consolida la intervención subsidiaria de los representantes del paciente en condiciones claramente establecidas, y sólo excepcionalmente se permite intervenir médicamente a falta de la conformidad de los anteriores. IU busca que la nueva norma, en caso de ser finalmente aprobada, sea completamente garantista. Así, reclama regular la fórmula conocida como consentimiento informado en relación a la interrupción o no iniciación de tratamientos cuando estos se limiten a mantener de un modo temporal o permanente una vida carente de conciencia de modo irreversible, o a prolongar artificialmente un proceso irreversible de muerte. La proposición de ley de IU incluye también una disposición adicional por la que se establece que el Gobierno creará un Registro Público de Voluntades Anticipadas para garantizar los derechos establecidos en la presente Ley a la ciudadanía de todas aquellas Comunidades Autónomas que no cuenten con tal registro. Izquierda Unida hace también referencia en el texto a una encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) donde se señalaba que el 65% de los médicos y el 85% del personal de enfermería ha afirmado que alguna vez ha recibido la petición de un enfermo terminal de morir, bien a través de un suicidio asistido o de la eutanasia activa. El mismo informe muestra que el 21% de los médicos reconoce que, a pesar de su ilegalidad, en España se practica la eutanasia. Además, la comisión especial creada en el Senado durante la VI Legislatura concluyó que en torno al 67% de las personas interrogadas estaban a favor de la legalización de la eutanasia.