Domingo, 24 de Noviembre 2024
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España UPEyDE Titulo: Caso Bankia. Fernández Ordóñez dice que no hizo nada para no dañar la reputación de la banca española. Texto: La declaración de Miguel Ángel Fernández Ordóñez (MAFO), gobernador del Banco de España en el momento en que se intervino Bankia, ante el juez que instruye la querella interpuesta por UPyD, ha sido quizás la más reveladora de las producidas hasta la fecha. El balance que se desprende del relato de MAFO es el de un Banco de España torpe, incapaz e irresponsable. A pesar de contar con los informes de sus muy profesionales inspectores, el supervisor bancario no hizo nada hasta que fue demasiado tarde. Ha repartido las culpas entre Rodrigo Rato, Luis de Guindos y las Comunidades Autónomas. Si se creyera por completo su versión de los hechos, habría que concluir que el prestigio del Banco de España no estaba justificado, ya que no servía para lo que tenía que servir. Mención especial merece su afirmación de que si el Banco de España no actuó contra la acumulación de riesgo inmobiliario en Bankia fue porque tendría que haberlo intervenido, lo que habría supuesto un daño reputacional para la banca española en su conjunto. Compárese esta afirmación con el lugar en que se encuentra ahora mismo la reputación de nuestro sistema financiero. Andrés Herzog, Secretario General del Grupo Parlamentario de UPyD en el Congreso de los diputados y responsable jurídico de la querella presentada por UPyD contra los responsables de Bankia, ha explicado cómo se ha llevado a cabo el interrogatorio al ex gobernador del Banco de España. El interrogado manifestó que el Banco de España perdió la confianza en Rodrigo Rato y entró en conversaciones para que permaneciera como presidente pero perdiera sus facultades ejecutivas en detrimento de un consejero delegado más profesional. Fernández Ordóñez reconoció que el Banco de España perdió el control de la situación en favor del Ministerio de Economía, quien en plena crisis exigió a Bankia un nuevo plan de saneamiento al margen del supervisor bancario. Esto no le gustó, pero lo aceptó por responsabilidad, tras pedir un informe jurídico que avalaba la legalidad de la actuación del Gobierno. El exgobernador también fue crítico con la falta de profesionalidad y politización de la gestión de Bankia, pero afirmó que el organismo que dirigía no tiene competencias en esas materias, y responsabilizó a las Comunidades Autónomas. El ex gobernador reconoció también las múltiples advertencias de los inspectores del Banco de España en relación a la politización de los consejeros, sus excesivas retribuciones y el deficiente control del riesgo - en especial del inmobiliarios -, pero se excusó porque, según él, lo único que podía hacer el Banco de España era intervenir las entidades, lo cual causaría un grave daño reputacional al sistema bancario. En resumen, la imagen que ha trasladado Fernández Ordóñez es la de un Banco de España superado por la situación y controlado por el poder político.