Domingo, 24 de Noviembre 2024
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España Partido Popular Titulo: Mas obliga a los catalanes a dividirse y abandona a una mayoría que no se siente representada por las banderas de la ruptura . Texto: Artur Mas ha convertido la Diada en el gran escaparate de los independentistas y niega a los catalanes una fiesta que es de todos. Con el debate sobre la consulta ilegal, Mas trata de ocultar su desgobierno con ERC. Mas trata de tapar con la estelada la ineficacia de su Govern, que está pendiente de presentar ahora los presupuestos de 2014. Artur Mas juega sucio con un discurso diferente según el interlocutor: ERC o el Gobierno de Mariano Rajoy. El Gobierno está dispuesto al diálogo basado en la lealtad institucional y en el cumplimiento de la legalidad. [u] Manifiesto con motivo de la Diada 2013: 11-S: Cataluña sí, España también [/u] ESTOS DÍAS leeremos declaraciones de dirigentes de CiU que dirán cosas contradictorias y abrirán escenarios diferentes porque quieren contentar a muchos, y lo que harán será engañar a todos. El plan A de Artur Mas y sus socios de ERC es un referéndum ilegal para la independencia a un año vista. El plan B, que anunció hace unos días Artur Mas con elecciones plebiscitarias en 2016, tiene el mismo objetivo que el plan A, la separación de España. La meta es la misma aunque retrase la hoja de ruta y parezca una aparente marcha atrás. La realidad es que, hasta ahora, la brújula del Gobierno de Cataluña la han tenido ERC y la ANC de Carme Forcadell, con un escenario de ruptura y confrontación y sin propuestas serias para recuperar la economía. Así no se va a ningún sitio. Si realmente CiU quiere corregir los errores cometidos, lo que debe abordar el gobierno de CiU es una rectificación clara de sus propósitos. Debe apartar la agenda independentista y centrarse en las prioridades de los catalanes: salir de la crisis y crear empleo. Para eso es necesario sumar los esfuerzos del gobierno autonómico a los del Gobierno de España, sumar esfuerzos de todas las fuerzas políticas y sociales serias y plantear reformas constructivas. En la nueva legislatura, tras su fracaso electoral, el gobierno de CiU ha utilizado la estrategia soberanista para tapar que ha sido incapaz de aprobar unos presupuestos para este año y que sus propuestas para salir de la crisis, acertadas o erróneas, brillan por su ausencia. Si lo que quiere Artur Mas ahora es sólo ganar tiempo, tampoco avanzaremos. Es necesario un replanteamiento de la política de la Generalitat para centrarnos en un nuevo modelo de financiación que sea más justo y en recuperar la economía catalana. Aquí encontrará la ayuda del PPC y la voluntad de diálogo del Gobierno de España. Este año, otra vez, vivimos un inicio de curso político convulso con la agria división entre catalanes que ha generado la estrategia de separación de España de CiU y ERC. Y esta fractura se ve en una Diada sectaria en la que el protagonismo no será de todos los catalanes, sino sólo de los que se sienten independentistas. Es, otra vez, una Diada de exclusión. Para nosotros, la Diada debe ser una jornada festiva, de encuentro entre catalanes y de celebración en un marco de convivencia. Así lo vemos y así lo hesiempre. El Gobierno de la Generalitat, en cambio, con todos sus medios una manifestación contra el resto de España, que será la más cara de la historia y que se pagará con los impuestos de todos los catalanes. Eso no es compatible con una Diada de unidad e integración de todas las sensibilidades, eso es pura hipocresía política. El PPC celebrará un acto abierto a todos para dar un mensaje de esmos defendido está apoyando peranza a la mayoría de catalanes que se sienten también españoles, para que sepan que tienen un referente en un partido moderado, que sabe priorizar los problemas reales de las personas y que quiere una Cataluña fuerte en la casa común que es España. Es el momento de lanzar un mensaje claro a los catalanes. Nadie debe escabullirse con palabras ambiguas, porque está en juego el futuro de muchas generaciones. Nadie puede saltarse nuestro marco democrático de derecho y la Constitución que deposita la soberanía nacional en el conjunto de los españoles. La cadena humana independentista tendrá sólo el apoyo directo de Convergència, ERC y la CUP. Cinco partidos, que suman la mayoría parlamentaria con 75 diputados, no dan su apoyo o, como ha hecho el PPC, muestran su rechazo a acciones que fracturen a la sociedad catalana. Cataluña es plural y nosotros insistiremos en nuestros objetivos políticos para centrarnos en la salida de la crisis y para proclamar con toda la dignidad: Cataluña sí, España también. Alicia Sánchez-Camacho es presidenta del Partido Popular catalán.