Internacional AMNISTIA INTERNACIONAL Titulo: Se debe entregar sin demora a la Corte Penal Internacional al ex jefe de los servicios de inteligencia del coronel Muamar al Gadafi. Texto: La Corte Penal Internacional(CPI)reclama la presencia de Abdullah al Senussi en La Haya en relación con su investigación sobre las acusaciones que lo señalan como responsable de los crímenes de lesa humanidad, entre los que se incluyen el asesinato y la persecución, cometidos en Libia el año pasado. Tras su detención, las autoridades francesas solicitaron que fuera extraditado para que cumpla la condena de cadena perpetua que se le impuso cuando fue juzgado in absentia por su implicación en el atentado con bomba cometido en 1989 contra un avión de pasajeros francés en el que murieron 170 personas. Puesto que los crímenes de lesa humanidad son crímenes cometidos contra toda la comunidad internacional, las órdenes de detención dictadas por la CPI por estos crímenes deben tener prioridad, ha manifestado Amnistía Internacional. La noticia de la detención de Al Senussi supone un momento importante para las víctimas de los crímenes que presuntamente cometió en Libia, ha señalado Donatella Rovera, asesora general de Respuesta a la Crisis de Amnistía Internacional. Pero el sistema judicial de Libia no funciona y su sistema de justicia sigue siendo débil e incapaz de llevar a cabo investigaciones efectivas sobre presuntos crímenes de lesa humanidad, ya que la legislación libia no los considera como tales. La CPI sigue siendo el mecanismo más indicado para conseguir la rendición de cuentas en Libia. Aunque Mauritania no es Estado Parte en el Estatuto de Roma, en su resolución el Consejo de Seguridad de la ONU ha instado a todos los gobiernos a colaborar plenamente con la CPI, remitiendo la situación en Libia a este tribunal. Las autoridades mauritanas deben dar prioridad a la orden de detención dictada por la CPI contra Al Senussi e iniciar sin demora los procedimientos penales para su transferencia. En junio de 2011, la CPI emitió una orden de detención contra Abdullah al Senussi, además de contra el coronel Muamar al Gadafi y su hijo Saif al Islam Gadafi, por dos cargos por crímenes de lesa humanidad —asesinato y persecución— presuntamente cometidos en Bengasi en febrero de 2011 por miembros de las fuerzas armadas bajo control de Al Senussi. A juicio de Amnistía Internacional, la orden de detención dictada por la CPI se debe ejecutar con carácter urgente a fin de garantizar que los presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos en Libia no quedan impunes y no se posterga el derecho de las víctimas a que se haga justicia y a obtener plena reparación. Muamar al Gadafi fue asesinado poco después de su captura en octubre de 2011, mientras que Saif al Islam al Gadafi lleva recluido en la ciudad libia de Zintan, al noroeste del país, desde su captura semanas después cerca de la frontera con Níger. No ha sido puesto a disposición judicial y se le sigue negando el acceso a representación letrada. Amnistía Internacional ha pedido reiteradamente que un tribunal competente e independiente investigue a Al Senussi y otros ex altos cargos libios por las presuntas violaciones de derechos humanos cometidas antes de 2011, así como durante la represión ejercida el año pasado. Entre los incidentes más graves figura el homicidio de unos 1.200 reclusos de la prisión de Abu Salim en 1996.
