España IA Titulo: Gaspar Llamazares tacha de escándalo la sentencia sobre el hundimiento del 'Prestige' . Texto: El portavoz parlamentario en temas judiciales de IU señala que es un día negro para la Justicia y lamenta que no haya ninguna responsabilidad civil ni penal en la que ha calificado como la mayor catástrofe ecológica de nuestro país en los últimos años El diputado de Izquierda Unida y portavoz parlamentario de Justicia del Grupo de IU, ICV-EUiA, CHA, Gaspar Llamazares, ha señalado hoy que la sentencia del juicio por el desastre ecológico del caso Prestige es un escándalo y que la justicia al cabo de 11 años no es justicia, porque una sentencia tardía no es justicia. En relación al fallo hecho público esta mañana por la Audiencia Provincial de A Coruña, Llamazares ha valorado que hoy es un día negro para la Justicia y que es un escándalo que no haya ningún responsable, ni civil ni penal, de una catástrofe que produjo la alarma y consecuencias ambientales muy importantes en las costas gallegas, tanto por el naufragio del petrolero Prestige como por la posterior gestión del desastre ecológico que causó. Ha destacado también que, además del hecho de que la sentencia sea exculpatoria y que la catástrofe no tenga condenas ni culpables, es particularmente un escándalo que no haya ningún responsable político en esta materia. Para el diputado de IU por Asturias, la sentencia del juicio del Prestige demuestra que algo no funciona bien en la justicia española y que ésta, en relación a este caso, deberá volver a opinar y volver a resolver porque ha sido un acto fallido. Llamazares admitió que esta sentencia se veía venir, entre otras razones por los sucesivos cambios en el juzgado de Corcubión y también por las dificultades durante estos 11 años para mantener la acusación. Gaspar Llamazares valoró que hay responsabilidad civil y responsabilidad penal, por lo que discrepamos radicalmente de la sentencia, no solamente porque es tardía sino por su contenido exculpatorio, que no nos satisface ni desde el punto de vista civil ni penal, en la mayor catástrofe ecológica de nuestro país en los últimos años.
