Sabado, 23 de Noviembre 2024
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Asturias UPEyDE Titulo: No apoyaremos nada que tenga que ver con cierre de hospitales o reducir recursos. Texto: Junto a la apertura del nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), es el proyecto sanitario estrella del Principado. La fusión de áreas -que en la práctica supondrá reducir la carga burocrática y pasar del actual mapa sanitario compuesto de ocho zonas a otro de cuatro- sigue estando en los planes estratégicos del consejero de Sanidad Faustino Blanco. La reciente prórroga presupuestaria y el evidente alejamiento con los que hasta ahora ejercían como socios puntuales de gobierno (IU y UPyD) no parece que vayan a hacer mella en este proyecto que requiere de la aprobación de una ley en la Junta General y que obligará al PSOE a esforzarse en la negociación parlamentaria. Para poder modificar el mapa sanitario, que data del año 1992, el Gobierno regional debe aprobar una nueva normativa que regule el Servicio de Salud del Principado (Sespa). La posibilidad de hacerlo por la vía del decreto, una alternativa que se llegó a valorar (sobre todo tras la prórroga), ha quedado descartada debido a que la separación de Asturias en ocho áreas sanitarias está regulado actualmente por ley, por lo que su modificación debe realizarse también mediante una norma del mismo rango. No es la primera vez que un Gobierno regional muestra su disposición a modificar el mapa sanitario, aunque nunca hasta ahora se había llegado tan lejos. El primer intento se remonta a 2006, cuando el entonces director general de Salud Pública, Ángel López, de IU, habló públicamente de ello, lo que le valió un importante rapapolvo por parte de los socialistas, con quienes entonces gobernaban en coalición. El proyecto se frenó en seco, aunque la coalición lo considera en gran parte de su autoría. La pretensión del actual Ejecutivo socialista, como ya lo avanzó en varias ocasiones el propio Blanco, es pasar de ocho a cuatro áreas. Asturias se divide en ocho espacios sanitarios geográficos: Jarrio (I), Cangas del Narcea (II), Avilés (III), Oviedo (IV), Gijón (V), Arriondas (VI), Mieres (VII) y Langreo (VIII). La idea es pasar a una distribución de cuatro zonas en la que las cuencas quedarían fusionadas, Gijón, Avilés y Oviedo seguirían siendo cabecera de distrito al que se le uniría las áreas más cercanas. En el caso de Avilés sería Jarrio; en el de Oviedo, Cangas del Narcea, y en el de Gijón, Arriondas. Consultados por EL COMERCIO, tanto IU como UPyD mostraron su disposición a apoyar la iniciativa de reducir el número de áreas sanitarias «siempre y cuando no suponga una merma de recursos». Así lo aseguró el diputado de UPyD, Ignacio Prendes, quien, no obstante, prefiere no adelantar acontecimientos «hasta que nos presenten el proyecto». Prendes señaló que su formación «es partidaria de la reordenación, ya que el actual mapa sanitario, que data del año 92, ha quedado obsoleto». Eso sí, el parlamentario aclaró que «no apoyaremos nada que tenga que ver con cierre de hospitales o reducir recursos». En el mismo sentido se pronunció Noemí Martín, de IU, quien recordó que el proyecto de modificar el mapa sanitario forma parte del programa de la coalición «desde hace años». Al igual que UPyD, Izquierda Unida adelanta que el apoyo está condicionado a que «no haya ni recortes, ni reducción de recursos ni pérdida de empleo». En cualquier caso, indicó que «la reordenación del mapa sanitario busca una gestión más eficiente y la posibilidad de que los hospitales y los centros sanitarios trabajen en red».